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martes, 3 de enero de 2012

Cuatro líneas de investigación contra el carcinoma oral felino de células escamosas

El carninoma oral felino de células escamosas es un tipo de cáncer que suele tener un mal pronóstico debido a que, habitualmente, se diagnostica cuando el problema está ya muy avanzado. Una fundación estadounidense está financiando cuatro líneas de investigación para combatirlo.

El cáncer oral es una enfermedad muy grave y relativamente frecuente en gatos sénior. El tumor más común es el carcinoma de células escamosas y suele tener un pronóstico muy malo debido a que los animales son llevados al veterinario cuando el cáncer ya está en un estado avanzado y no va a responder bien al tratamiento.

La Morris Animal Foundation está financiando en Estados Unidos cuatro líneas de investigación sobre el carcinoma oral felino de células escamosas, según informa en su blog.

Susan M. LaRue, de la Colorado State University, está comprobando la eficacia de la radiación estereotáctica, una nueva terapia que consiste en irradiar a los pacientes con dosis de radiación más altas de lo habitual pero por tiempos más breves. De esta forma se consigue que la terapia se centre más eficazmente en los tejidos cancerosos, reduciéndose así los efectos secundarios y mejorando la calidad de vida de los gatos durante el tratamiento.

En la Tufts University, los doctores Elizabeth A. McNiel y Kevin Mayo investigan cómo cortar el suministro sanguíneo del tumor. Tratan de encontrar la forma de inhibir la creación de vasos sanguíneos que aporten nutrientes al tejido canceroso y destruir los que ya lo estén haciendo. Mayo ha diseñado una proteína que destruye las células endoteliales de los vasos sanguíneos y están probando su eficacia.

William C. Kisseberth lidera un equipo de la Ohio State University que ha investigado un nuevo tipo de medicamentos anticancerosos, los inhibidores de la histona deacetilasa, para combatir el cáncer oral en gatos. En ratones y personas ya se ha comprobado que actúan inhibiendo el crecimiento tumoral, pero son necesarios más estudios clínicos para ver la actividad de este producto en felinos.

Y el cuarto estudio también se está desarrollando en la Ohio State University, por parte de Smitha Pillai y Thomas Rosol, que están investigando diferentes alternativas para prevenir la destrucción ósea que produce el carcinoma oral, cuyas consecuencias son pérdida de piezas dentales, infección del hueso y dolor intenso. Han observado que la combinación de inhibidores de la resorción ósea con antineoplásicos tiene un efecto positivo. Por Joaquín Ventura García PVArgos