La enfermedad del parásito del corazón es grave y potencialmente fatal, afortunadamente se puede prevenir. Este parásito afecta principalmente a perros, gatos y hurones. También se presenta en una variedad de animales incluyendo los cánidos salvajes (por ejemplo, zorros, lobos y coyotes), felinos salvajes (por ejemplo, tigres, leones y pumas), mapaches y zarigueyas y también los pinnípedos (por ejemplo, leones marinos y focas), entre otras especies de animales. En algunas ocasiones se ha reportado en seres humanos. Estos casos en humanos son considerados biológicamente de poca frecuencia y no producen ninguna enfermedad clínica.
¿De dónde proviene y que causa la enfermedad del parásito del corazón?
La infestación del parásito del corazón es transmitida de animal a animal solamente por medio de los mosquitos. Cuando un mosquito pica a un perro afectado, chupa la sangre que puede tener la presencia de formas juveniles microscópicas del parásito conocidas como "microfilarias". Estas microfilarias se incuban en el mosquito aproximadamente por dos semanas, y durante ese período llegan a ser larvas infestantes; entonces, cuando el mosquito pica a otro animal, las larvas infestantes son transmitidas a través de la picadura. A diferencia de los perros, a menudo, los gatos infestados no presentan microfilarias circulando en la sangre, por lo tanto, no es probable que los gatos transfieran las microfilarias a otros mosquitos. Durante los siguientes seis meses, la larva infestante se desarrolla hasta llegar a ser adulto. En los primeros tres meses, la larva migra por los tejidos corporales del animal, entonces pasa a los vasos sanguíneos pulmonares en donde alcanza, en los últimos tres meses, aproximadamente el tamaño adulto. Una vez situados, las hembras de los parásitos adultos pueden llegar a medir hasta 14 pulgadas de longitud. Después de un tiempo, los grandes vasos sanguíneos que conectan el corazón con los pulmones son principalmente lesionados por los parásitos del corazón. Tanto el bloqueo como el daño causado por los parásitos del corazón, pueden llegar a causar falla cardiaca o una afección grave en los pulmones. Cuando el animal muestra signos clínicos de la enfermedad debido a la infestación con parásitos adultos se denomina enfermedad del parásito del corazón. Si los parásitos adultos de ambos sexos (5 a 7 meses después de la infestación) están presentes y alcanzan su capacidad reproductiva, pueden producir nuevas microfilarias, las cuales pueden dañar otros órganos cuando el sistema inmunológico del animal trata de combatir la infestación. El ciclo de vida continúa cuando el mosquito pica a un animal infestado e ingiere la microfilaria. Después del desarrollo de la microfilaria en larva infestante dentro del mosquito (10 días a 2 semanas después), esta larva infestante es capaz de afectar a otro animal. En los perros, los adultos del parásito del corazón pueden sobrevivir de 5 a 7 años y varios meses.
¿Dónde se localiza geográficamente la enfermedad del parásito del corazón?
Geográficamente, la enfermedad del parásito del corazón es considerada como una amenaza potencial en casi todas las regiones de España, así como en muchos otros países alrededor del mundo. Todos los perros, sin importar la edad, sexo o el medio ambiente en el que viven, son susceptibles a la infestación del parásito del corazón. Aún los gatos que viven en el hogar como los que viven al aire libre, tienen el riesgo de adquirir la enfermedad. Si usted planea realizar un viaje con su perro o gato a diferentes regiones del país o a otros países, asegúrese de consultar con su Médico Veterinario sobre el riesgo de la enfermedad del parásito del corazón en el área que visitará o al lugar donde usted piensa mudarse.
¿Cuáles mascotas deben examinarse para determinar la presencia del parásito del corazón?
Debido a que el parásito del corazón es transmitido por los mosquitos, cualquier mascota que pueda estar expuesta a estos insectos debe examinarse. Esto incluye a las mascotas que ocasionalmente salen al aire libre.
¿Cómo puedo saber si mi mascota esta afectada por la enfermedad del parásito del corazón?
Perros:
Si su perro ha sido infestado recientemente o tiene baja carga parasitaria, es difícil que aparezcan los signos de la enfermedad hasta que los parásitos adultos se han desarrollado en los pulmones y las señales de la enfermedad del parásito del corazón se observan. En estados avanzados, cuando el curso de la enfermedad progresa, la presencia del parásito del corazón se manifiesta por, tos frecuente, somnolencia, pérdida de apetito o respiración forzada. Al principio, el dueño posiblemente notará que el perro muestra un rápido cansancio después de hacer ejercicio moderado. En la actualidad existen numerosas pruebas de diagnóstico para que su Médico Veterinario examine una muestra de sangre y detecte la presencia de parásitos adultos en su perro (infestaciones de más de 6 meses). Las pruebas antigénicas detectan la presencia del parásito hembra adulto y las pruebas de anticuerpos determinan si su mascota ha sido expuesta al parásito del corazón. La prueba del antígeno es la más utilizada y provee resultados muy acertados en perros. Algunas pruebas adicionales también son de gran utilidad, como radiografía de tórax (rayos X), análisis clínico de sangre y un ecocardiograma (ultrasonido del corazón), suelen ser necesarias para confirmar el diagnóstico, para evaluar la severidad de la enfermedad y para determinar la estrategia de tratamiento mas adecuado para su perro.
Gatos:
Algunos posibles signos clínicos de la enfermedad del parásito del corazón en el gato incluyen tos, respiración forzada, y vómito. En casos raros, un gato puede morir repentinamente a causa de la infestación por parásitos del corazón. En los gatos la evaluación del diagnóstico de la enfermedad del parásito del corazón es más difícil de determinar que en los perros. Pueden ser necesarias diferentes tipos de pruebas para que ayuden a determinar una posible infestación como la causa de enfermedad en su gato y aun así, es posible que los resultados no sean concluyentes. En general, para el diagnóstico del parásito del corazón en los gatos se recomiendan ambas pruebas; la del antígeno y la del anticuerpo porque brindan una mayor oportunidad para detectar la presencia del parásito del corazón en esta mascota.
¿Cuál es tratamiento ideal para mi mascota?
PERROS:
Como en la mayoría de los problemas médicos, la mejor defensa es la prevención de la infestación del parásito del corazón que su tratamiento. Sin embargo, si su perro llega a ser infestado con el parásito, hay medicamento disponible aprobado por la FDA. Aunque existe un cierto riesgo con el tratamiento, muy raramente habrá complicaciones serias en aquellos perros que en general tienen buena salud y cuando usted sigue cuidadosamente las instrucciones de su Médico Veterinario. El objetivo del tratamiento es eliminar los parásitos adultos y las microfilarias presentes en los tejidos corporales del perro de la forma más inocua posible. Sin embargo, cuando su perro es sometido al tratamiento es importante considerar que los parásitos son destruidos en sus pulmones. La mascota deberá permanecer hospitalizada durante el tratamiento y por supuesto requerirá de reposo absoluto por un tiempo después del último tratamiento. Auxiliarmente, otros medicamentos pueden ser necesarios para que ayuden a controlar la reacción inflamatoria cuando los parásitos mueren en los pulmones y son destruidos por el organismo.
GATOS:
En la actualidad no existe tratamiento médico eficaz y seguro para los gatos afectados con el parásito del corazón. Si a su gato se le diagnostica esta enfermedad, su Médico Veterinario puede recomendarle tratamiento sintomático para reducir tanto la inflamación causada por la enfermedad o los procedimientos quirúrgicos para remover los parásitos adultos.
¿Se pueden remover quirúrgicamente los parásitos del corazón?
Médicos Veterinarios especialistas están preparados para remover quirúrgicamente los parásitos del corazón en perros y gatos, sin embargo este procedimiento tiene mucho riesgo y es típicamente reservado para casos extremos. Sin embargo, en muchas ocasiones, el procedimiento quirúrgico utilizado para remover los parásitos adultos puede ser el último recurso para salvar la vida de su mascota.
¿Se puede prevenir la enfermedad del parásito del corazón?
En perros y gatos se puede prevenir casi el 100% de la enfermedad del parásito del corazón, mediante la administración de medicamentos preventivos con diferente formulación aprobados por la FDA. Su Médico Veterinario puede recomendarle el mejor método de prevención, basado en el historial de factores de riesgo y la forma de vida de su mascota. ¡Por supuesto, usted tiene que acordarse de dar a su mascota el medicamento para que este pueda ser efectivo! Los medicamentos preventivos no destruyen al parásito adulto, no eliminan la infestación por el parásito o previenen los signos clínicos de la enfermedad si los parásitos adultos están presentes en el cuerpo de la mascota. Por lo consiguiente, antes de iniciar el programa preventivo, su Médico Veterinario realizará una prueba de sangre, necesaria para confirmar si su mascota está afectada o no por la enfermedad del parásito del corazón. Debido a que es más difícil detectar la presencia de este parásito en el gato, pueden ser necesarias pruebas adicionales para asegurar que el animalito no ha sido infestado. Las pruebas de laboratorio deben repetirse a intervalos adecuados. La siguiente prueba debe realizarse aproximadamente 6 meses después de empezar el tratamiento preventivo para confirmar que su mascota no ha sido infestada antes de iniciar este tratamiento (debe recordarse que las pruebas de laboratorio solo detectan la presencia de los parásitos adultos). Se recomienda hacer pruebas de laboratorio anuales para asegurar que la mascota no haya sido subsecuentemente infestada con el parásito del corazón y así se podrá confirmar si el tratamiento y su administración fue adecuado. Ha habido reportes de mascotas con parasitosis en vías de desarrollo a pesar del tratamiento preventivo durante todo el año, por lo tanto se recomiendan pruebas de laboratorio en forma regular para tener la seguridad de que su mascota ha sido debidamente protegida.