A pesar de que es obligatorio, casi la mitad de los perros de la Costa Daurada no están inscritos ni debidamente identificados en el registro de animales de compañía de los Ayuntamientos. El incumplimiento de la normativa, que recoge la Llei de Protecció d’Animals de Companyia de la Generalitat 22/2003, considerada como infracción leve, puede ser sancionada con una multa entre 100 y 400 euros.
Con el objetivo de acabar con el incivismo de algunos propietarios el año pasado, los ayuntamientos de Salou y Cambrils aprobaron una nueva ordenanza sobre la tenencia de animales de compañía, adecuándola a la normativa autonómica vigente. Según la concejal de Medi Ambient del Ayuntamiento de Salou, Monsterrat Porter, la adaptación a la nueva ley «servirá para combatir el incivismo de algunos propietarios que hacen caso omiso de sus obligaciones».
Y la ley no es precisamente benévola, ya que las sanciones de la misma pueden ascender a 30.000 euros, dependiendo de la infracción. No señalizar las instalaciones en las que hay perros peligrosos o no llevarlos debidamente atados, puede implicar una sanción de 2.000 euros, aunque pegar a un perro y causarle daños físicos puede costar a su propietario 20.000 euros.
Las multas más ejemplares y más elevadas son las que se aplican a los propietarios de perros peligrosos que realicen actividades de adiestramiento de ataque no autorizadas o participen en combates de perros. En este caso las sanciones ascenderán hasta los 30.000 euros. Cabe destacar que ninguno de los dos consistorios, no ha impuesto, de momento, ninguna multa por infracción muy grave.
Tipología de sanciones
En Cambrils, durante el último año se han interpuesto un total de 16 sanciones, una cifra muy inferior a la de Salou, donde asciende hasta las 95. En el caso de Cambrils la mayoría de ellas han tenido que ver con animales no censados. Es decir, perros o gatos que no llevaban el chip identificativo obligatorio.
En este caso, las multas oscilan entre los 100 y los 400 euros. El resto de sanciones en Cambrils han tenido que ver con molestias a vecinos, alimentación de animales en la vía pública o por llevar perros peligrosos sin bozal.
En el caso de Salou la mayoría de infracciones tienen que ver con las defecaciones, un total de 63. También son destacables las denuncias interpuestas por no llevar chip identificativo y las relacionadas con animales potencialmente peligrosos.
Censo único
Para llevar un mejor control del censo de animales, el pasado mes de noviembre la Generalitat puso en marcha un censo único. El objetivo, centralizar los datos de identificación de animales y combatir así su abandono, un fenómeno que ha aumentado un 15% en Catalunya a raíz de la crisis económica.