Un Cachorro en Casa
ANTES de adquirir el cachorro - Educación del cachorro y educación del dueño
Sin duda la fecha tope más urgente es ANTES de adquirir al cachorro. Lo más importante es la educación de su cachorro y su propia educación. Desde el momento en que usted lleva al nuevo perro a casa, digamos a las 8 semanas de edad, ya debería estar acostumbrado al medio ambiente doméstico (especialmente ruidos) y bien socializado con personas. Igualmente, el adiestramiento de hábitos de eliminación, morder juguetes adecuados y la educación de las conductas básicas debería ir en marcha. Si no, el desarrollo social y mental de su futuro cachorro serán severamente retardados y lamentablemente usted estará jugando a alcanzarlo por el resto de su vida.
Asegúrese de que su futuro cachorro haya sido criado dentro de una casa en contacto con su familia de origen, quienes se habrán tomado el tiempo de comenzar la educación del perro. Su cachorro necesita estar preparado para el clamor de la vida doméstica - el ruido de la aspiradora, los gritos de los programas deportivos en la televisión, niños llorando y adultos discutiendo. Exponerlo a estímulos semejantes antes que los ojos y oídos del cachorro estén completamente abiertos (cuando su visión es borrosa y sus oídos se están aún desarrollando), le permite llegar a acostumbrarse a visiones y sonidos que de otra manera podrían asustarlo cuando adulto. No hay mucho que decir sobre la elección del cachorro que ha sido criado en una retirada perrera, donde raramente interactúa con personas, en donde se ha acostumbrado a ensuciar el lugar donde vive y a aullar bastante. Si usted quiere un perro de compañía para compartir su casa, obviamente debería ser criado en un hogar y no en una jaula.
El día que usted adquiera el cachorro el reloj estará corriendo. Y el tiempo vuela. El período crítico de socialización de su cachorro comenzará a menguar a los 3 meses y el período de mayor aprendizaje comienza a cerrarse a los 5 meses. No sorprende que la mayoría de las conductas y los problemas de temperamento se crean durante este período. Hay mucho que enseñar y casi todo necesita ser educado dentro de solo 12 semanas, cuando el cachorro tiene entre 2 y 5 meses de edad. Es vital que usted sepa QUE enseñar y COMO hacerlo. Yendo a clases para cachorros, leyendo libros sobre conducta y adiestramiento canino y viendo videos sobre cachorros, es la manera más rápida de encontrar la respuesta. Pero, usted necesita hacerlo ANTES de adquirir su cachorro.
¡El primer día! La familia
Los problemas de conducta son la más predominante de las “enfermedades terminales” en los perros. Y tristemente, muchos de ellos firman su sentencia de muerte durante sus primeros días en casa. Si su cachorro está siempre sin supervisión dentro de la casa, tan seguro como que los huevos son huevos, es predecible que morderá las cosas de la familia y ensuciará por todas partes. Mientras esos pequeños accidentes ocasionan pequeños daños, fijarán el precedente para los juguetes y el baño de su cachorro para los meses que vendrán.
Cada “error” de suciedad y mordidas en la casa es un potencial desastre, desde entonces anuncia los futuros errores de un perro que tendrá una vejiga más grande y unas mandíbulas más destructivas. La mayor parte de los dueños comienzan a notar los destrozos de su cachorro cuando ya tiene 4 o 5 meses de edad. Característicamente, el cachorro es relegado al patio. Como producto del aburrimiento y la falta de supervisión, el cachorro comienza a destruir todo como una terapia ocupacional para pasar el día. Por otra parte, el natural nivel de actividad hará que el solitario cachorro haga hoyos, escape y ladre.
Una vez que los vecinos reclaman, el perro es usualmente confinado más lejos, en el garage o en el sótano - generalmente una parada temporal hasta que sea entregado al refugio de animales para jugar la lotería de la vida. Menos del 25% de los perros abandonados son adoptados y cerca de la mitad de ellos son devueltos tan pronto como sus nuevos dueños descubren que adoptaron un desagradable problema adolescente.
Lo anterior resume la triste suerte de muchos perros. Especialmente triste, porque todos esos simples problemas pudieron ser prevenidos fácilmente. Mientras más confine a su perro en su guarida y sala de juegos durante estas primeras semanas en casa, mayor libertad disfrutará como un perro adulto por el resto de su vida.
SIEMPRE confine a su cachorro a su sala de juegos todas las veces que sea necesario dejar al cachorro solo en casa, o todas las veces que usted está en casa pero no puede dedicar tiempo a los procedimientos de adiestramiento para hacer sus necesidades descritos más adelante. Una protegida cocina o baño pueden ser una buena sala de juegos. Asegúrese de remover toda alfombra y artículos familiares del alcance de la mano. O usted puede comprar una jaula transportable. La Sala de Juegos para el cachorro debe contener i) una confortable cama en una esquina, ii) un baño indicado para perros en otra esquina, iii) un recipiente con agua fresca y iv) una cantidad de juguetes huecos para morder rellenados con un par de trozos de galletas.
Para el baño del perro, yo sugiero que tienda una lámina de linóleo, cubierta con una lámina de plástico desechable, bastante papel periódico y con el eventual sustrato de baño encima. Por ejemplo, para cachorros rurales y suburbanos, quienes eventualmente aprenderán a hacer sobre el césped, esparza un poco de tierra o coloque un par de rollos de césped encima. Para cachorros urbanos, quienes eventualmente aprenderán a hacer en la calle, coloque un par de bloques de concreto. Su cachorro pronto desarrollará una fuerte y natural preferencia por hacer sus necesidades en un sustrato similar en el exterior, cada vez que pueda.
Los productos Kong (ver foto) son los Cadillac de los juguetes para mordisquear. Los largos huesos huecos esterilizados son una buena segunda opción. Rellénelos con solo uno o dos premios sabrosos, que solamente puedan ser removidos con gran dificultad. El hígado seco y congelado es el Lamborghini de los premios para perro. Entonces, rellene los juguetes para masticar con abundante alimento o con huesitos (desde la ración diaria de su cachorro). Su perro pronto desarrollará un fuerte hábito a mordisquear juguetes desde que usted limitó sus alternativas a un solo tipo de juguete aceptable, al que usted le ha dado una buena razón para morderlo.
SIEMPRE confine a su perro a su corral cuando usted no esté en casa, pero si no puede dedicar el 110% de su atención para monitorear la conducta de su cachorro, las jaulas portátiles son ideales. El corral para su perro debe contener una cama confortable más varios juguetes rellenos de comida para mordisquear. Durante sus primeras semanas en casa, este es un maravilloso truco para servirle la comida a su perro solamente en juguetes rellenos para morder. Usted puede servir la comida de su perro en un recipiente una vez que se haya convertido en un verdadero “KONGohólico” y no haya tenido ni una sola equivocación al morder otros objetos al menos en 3 meses.
Por lo menos cada hora, libere a su cachorro de su corral, rápidamente colóquele la correa y llévelo al área donde puede hacer sus necesidades. Deténgase ahí y déle al cachorro solo 3 minutos para hacer. Cuando ocurra déle un gran premio y ofrézcale 3 trocitos de hígado seco congelado como premio por el buen trabajo hecho. Si ya hizo, ahora su desocupado cachorrito puede hacer una exploración supervisada por la casa unos momentos antes de volver a su corral. Si su cachorro no hizo sus necesidades en el tiempo asignado, simplemente póngalo de regreso en su jaula e inténtelo de nuevo en una media hora más.
RECUERDE, aparte del adiestramiento para morder juguetes, confinar a su cachorro en su jaula por cortos períodos de tiempo inhibe su eliminación temporalmente, entonces él necesitará aliviarse de inmediato cuando usted lo suelte cada una hora por lo que usted tiene que estar ahí para indicarle el área APROPIADA Y TAMBIÉN DEBE ESTAR AHÍ PARA PREMIARLO.
Al principio puede recompensar a su cachorro por usar su área de baño en el jardín, pero debe esperar hasta que su cachorro haya completado su calendario de vacunas antes de exigirle evacuar apropiadamente en lugares públicos. Hasta que su cachorro tenga desarrollada suficiente inmunidad (entre los 3 y 4 meses), no debería andar u oler donde otros perros hayan estado antes.
Socialización y conductas básicas
El momento óptimo para socializar al cachorro es ANTES de los 3 meses de edad. Desafortunadamente, su perro necesita estar confinado dentro de la casa hasta entonces. Este relativamente corto período de aislamiento en semejante etapa crucial de su desarrollo podría arruinar el temperamento de su cachorro. Mientras que la socialización perro-perro puede dejarse en una temporal pausa, hasta que su cachorro tenga la edad suficiente para ir a la escuela para cachorros y al parque, nosotros simplemente no podemos demorar su socialización con personas. Por el contrario, durante el primer mes mientras su cachorro está creciendo en su casa, socializarlo con personas será su principal lección. Sin duda, criar y adiestrar a su cachorro para ser amistoso con las personas es lejos el aspecto más importante en su crianza.
Aproveche el tiempo en que su perro está confinado en la casa para invitar personas. Como una regla su cachorro necesita socializar con al menos unas 100 personas antes que cumpla los 3 meses de edad. Esto es mucho más sencillo de lo que parece. Invite a diferentes grupos de 8 hombres cada domingo para ver los partidos de fútbol por televisión (generalmente los hombres son más fácil de atraer y entrenar si usted les ofrece pizza y cerveza). Cada lunes invite a diferentes grupos de 8 mujeres para ver la telenovela. Puede ponerse al día en todas sus obligaciones sociales pendientes invitando a la familia, amigos y vecinos a semanales “fiestas de cachorro”. En otra tarde de la semana invite algunos niños del vecindario. Sobre todo, no deje a su cachorro encerrado. Y por supuesto, lo mejor de socializar al cachorro es que también ¡hace maravillas con su vida social!
Muéstreles a sus invitados como pueden darle algunos trozos de comida al
cachorro para adiestrarlo a que venga, se siente y se eche. Pídale a su
cachorro que venga. Prémielo apenas se aproxime y ofrézcale un poco de
comida cuando llegue hasta usted. Retroceda y hágalo otra vez. Repita la
secuencia de llamada una y otra vez. Luego dígale al cachorro “sienta” y
suavemente mueva un trozo de comida por el frente de su nariz, entre
los ojos del cachorro. Cuando el perro levante la nariz para oler la
comida, bajará sus cuartos traseros y se sentará. Si el cachorro salta,
usted está sosteniendo el señuelo demasiado alto, entonces repita el
procedimiento con la comida más cerca del hocico del perro.
Cuando su
cachorro se siente diga “buen perro” y déle un premio. Ahora diga
“échate” y baje un trozo de comida desde la nariz del perro hasta
entremedio de sus patas delanteras. Como el cachorro usualmente baja su
cabeza para seguir la comida probablemente se echará. No se preocupe si
su perro se para, solo mantenga el trozo de comida escondido en la palma
de su mano hasta que se eche. Cuando logre hacerlo, dígale “buen perro”
y déle un premio. Ayude a sus invitados a practicar estas maniobras
hasta que cada uno pueda llamar al cachorro y pedirle que se siente y
eche unas 3 veces a cambio de un trocito de comida.
Cuando el
cachorro se acerca rápida y felizmente, es un signo infalible de que su
perro es amistoso con las personas. Sentarse y echarse cuando se le pida
nos muestra su voluntad por complacer y el respeto por la persona que
da las instrucciones. Si su cachorro está regularmente siendo alimentado
de la mano de sus invitados de esta manera, de pronto aprenderá a
disfrutar la compañía de las personas y a aproximarse feliz y sentándose
automáticamente cuando lo saludan. Y por supuesto, como un bono
agregado, usted ha entrenado exitosamente a su familia y amigos ¡a
adiestrar a su perro por usted!
Escuela para cachorros
Tan pronto como su cachorro cumpla los 3 meses de edad hay una considerable urgencia por ponerse al día con su socialización y confianza con otros perros. A más tardar asegúrese que su cachorro comience sus clases de adiestramiento antes de las 18 semanas de edad. Los 4 meses y medio de edad marcan un momento crítico en el desarrollo de su perro, determinando con precisión el momento en que su cachorro pasa a ser un adolescente - algunas veces virtualmente de la noche a la mañana. Y usted seguramente quiere inscribir a su cachorro en clases antes de toparse ¡con un adolescente! Yo simplemente no puedo dejar de enfatizar la importancia de que ponga usted mismo a su cachorro bajo la guía y tutelaje de un adiestrador profesional, mientras está negociando con la precaria y espeluznante transición desde la niñez a la adolescencia de su cachorro.
La mayoría de los cachorros pueden comenzar en forma segura sus clases a los 3 meses de edad. Las salas de “clases” son justamente lugares seguros para ellos, ya que se presentan solamente cachorros con sus vacunas al día y el piso es regularmente desinfectado. Por suerte, las razas que algunas veces tienen problemas de inmunidad (Rottwailer y Doberman) tardan más en desarrollarse y está bien retrazar el comienzo de sus clases hasta antes de los 4 meses. Yo también aconsejaría evitar por el momento llevar a los cachorros a los parques o pasear en lugares públicos (donde otros perros han estado antes) hasta que tengan al menos 4 meses de edad (usted siempre puede practicar caminar con correa alrededor de su casa y jardín, antes de pasar vergüenzas en público).
Las clases para cachorros le permiten a su perro desarrollar su
comunicación social canina jugando con otros cachorros en un marco
controlado y sin amenazas. La mayoría de las clases de cachorro están
orientadas a la familia por lo que su perro tendrá la oportunidad
adicional de socializar con todo tipo de personas - hombres, mujeres y
niños.
Y entonces hay un juego de adiestramiento. Literalmente le
sorprenderá lo mucho que su cachorro aprende solo en su primera clase.
Los cachorros tímidos y temerosos ganarán confianza a pasos agigantados y
los saltos y amenazas aprenderán a suavizarse y a ser más amables.
Todos los perros aprenderán a venir, sentarse y echarse cuando se le
pida, escuchar a sus dueños e ignorar las distracciones. Pero realmente
usted está asistiendo al curso de cachorros porque ¡USTED puede
aprender! Y todavía hay mucho por aprender. Usted aprenderá como
controlar la mordida de su cachorro que ahora se acercará a su nivel
máximo.
Descubrirá muchos datos útiles para resolver problemas de
conducta. Y aprenderá como controlar este hiper-turbo, tan poderoso,
ruidoso y desordenado que es parte de la adolescencia. Aunque después de
todo, ¡las clases de cachorro son absolutamente geniales! Usted no
olvidará nunca el primer día de clases de su cachorrito. El curso de
cachorros es una aventura.... para usted y su perro.
Buscando las clases para cachorro
Seguramente usted habrá buscado varias escuelas antes de adquirir su cachorro y habrá tenido alguna idea de qué está buscando, pero si no, aquí tenemos algunos consejos:
Evite escuelas: que sean partidarias del uso de cualquier tipo de collar eléctrico o cualquier tipo de castigo físico, que atemoricen o dañen a cualquier cachorro. POR FAVOR recuerde, las técnicas de “descargas, sacudidas, agarre y zamarreo, dominancia y forzar posturas de sumisión” están consideradas agobiantes y son pérdidas de tiempo, relativamente inefectivas, potencialmente peligrosas y en muchos casos claramente adverso y desagradable. Tales métodos obsoletos hoy en día, ¡gracias a dios!, son cosas del pasado. Solo imagínese estando usted mismo en las patas de su cachorro. RECUERDE él es su cachorro y su educación y seguridad están en sus manos. Usted será el juez. Hay muchas otras maneras. ¡Busque hasta que las encuentre!
Busque cursos: donde a los cachorros se les dé amplias oportunidades de jugar juntos sin correa, donde los cachorros son frecuentemente educados y calmados durante la sesión de juegos, donde los cachorros aprendan a gran velocidad, usando juguetes, recompensas, diversión y juegos. Y sobre todo, ¡donde su cachorro pase un buen momento!
La gran salida
Es el momento de llevar a su perro afuera y paseando.
Asegúrese de llevar una pequeña bolsa de comida con usted. Déle un par de
trocitos de comida con cada extraño que quiera conocer a su perro y para pedirle
al extraño que le dé un premio solamente después de sentarse para saludar. Trate
de llevar a su perro a todas partes - paseos alrededor de la ciudad, viajes en
auto para visitar amigos, picnic en el parque y especialmente a explorar el
vecindario. Es hora de muchos paseos, más paseos y cada vez más paseos.
Solo
unas palabritas de advertencia: ¡TIRANDO LA CORREA! ¡NO VIENE CUANDO LO LLAMA O
VIENE MUY LENTO! ¡Si! A los cinco meses usted comenzará a darse
cuenta que el record canino de tiro excede las 10.000 libras y que su perro ha
comenzado a ignorarlo. La infancia de su perro ha acabado. Pero aquí hay algunos
consejos que lo ayudarán.
Antes de pensar en ir a cualquier parte, intente
este simple y efectivo ejercicio. Ponga un poco de comida de perro en un bolsito
y hoy su perro comerá su ración durante el paseo. Sostenga un grano de alimento
en su mano, quédese quieto y espere a que su perro se siente. Ignore cualquier
otra cosa que el perro haga, él eventualmente se sentará. Cuando lo haga, diga
“buen perro”, déle un premio, luego dé solo un gran paso hacia
adelante, deténgase y espere a que su perro se siente de nuevo. Repítalo una y
otra vez hasta que su perro se siente inmediatamente cada vez que usted se
detiene. Ahora dé 2 pasos antes de detenerse. Luego, intente dar 3 pasos y
deténgase, y luego 5, 8, 10, 20 y así sucesivamente. Por ahora usted habrá
descubierto que su perro camina tranquilamente y atento a su lado y se sienta
inmediata y automáticamente cada vez que usted se detiene. Usted ha adiestrado
todo esto en solo una sesión y las únicas palabras que ha dicho son
“¡buen perro!”
Intente tomar unos pocos minutos de descanso en cada paseo. Quizás sentarse, relajarse y leer la última revista sobre mascotas y déle a su perro una oportunidad de echarse y ver al mundo pasar. Usted descubrirá que llevando algún juguete relleno su perro se echará rápidamente y se quedará tranquilo. Recuerde, la calle puede ser un lugar espeluznante donde puede haber sorpresas que atemoricen a su perro.
La mejor estrategia es prevenir estos problemas, nunca dé por sentada la sensibilidad que tiene su perro por los ruidos. En vez de eso, dé a su perro un trozo de comida cada vez que pase un gran camión, una ruidosa motocicleta, o un niño en una patineta para que su perro no sobre-reaccione.
Trate de no dejar a su perro suelto para que corra y juegue con otros perros sin interrupción, ya que de esta manera usted pronto tendrá un perro que rehusará venir cuando lo llaman. En vez de eso, lleve la cena de su perro al parque y entremedio de su sesión de juego llámelo cada minuto o más y pídale que se siente por un par de trozos de comida. Su perro pronto captará la idea y sus entusiastas llamadas serán la envidia de todos.
¡Siempre!
Continué caminando con su perro al menos una vez al día y llévelo al parque varias veces a la semana. Trate de buscar diferentes lugares y diferentes parques para pasear, así su perro continuará conociendo una amplia variedad de DIFERENTES perros y personas. Si su perro solamente ve a las mismas personas o a los mismos perros todo el tiempo, progresivamente comenzará a "desocializarse". Eventualmente su perro se volverá intolerante a los extraños, solo aceptando a su pequeño círculo de amigos. Usted ha socializado con éxito a su cachorro para ser amistoso con los perros y con las personas y si usted quiere continuar en este camino es esencial que conozca a diferentes personas y perros cada día. También, mientras está en eso, no olvide mantener su propia mejorada vida social organizando las fiestas de cachorro al menos una vez a la semana - solo para asegurarse que sus amigos sigan trabajando duro adiestrando a su perro por usted.
Ahora es el momento de disfrutar la vida con su amistoso y obediente perro. Déle a su perro un hueso muy especial - “¡buen perro!” y dese usted mismo una palmadita en su espalda - “¡buen dueño!”
Por;
Dr. Ian Dunbar
Trad: Erik Farina, Psicólogo Canino y Adiestrador
Profesional