Esta Investigación en el artículo de Acción fue proporcionada a LiveScience en la sociedad con la Fundación de Ciencia Nacional.
La enfermedad de gusano del corazón es una epidemia creciente para animales domésticos en los Estados Unidos, y mientras los perros a menudo tienen que ver con la enfermedad, también puede ser devastador a gatos. La enfermedad es causada por Dirofilaria immitis, un tipo de nematode. Requieren a un anfitrión intermedio para la maduración del filarial nematodes, que son recogidos y entran en la corriente sanguínea de un anfitrión como microfilariae, que no son gusanos del corazón inmaduro (antes de que la primera etapa larval). Los gusanos del corazón toman aproximadamente dos semanas para progresar por sus tres primeras etapas larvales, en cual punto ellos pueden ser transmitidos a un anfitrión susceptible secundario. Una vez transmitido, el gusano del corazón molt en etapas larvales adicionales y toman aproximadamente seis meses para hacerse sexualmente maduros. Si ambos los sexos nematode están presentes en una corriente sanguínea, ellos pueden producir más microfilariae, aunque sea poco común en gatos.
En perros, el número de poner en circulación microfilariae en la sangre aumenta en las temperaturas mas calidas, después de la comida, y tarde por la noche. Los Microfilariae tienen una vida útil media que circula en la corriente de sangre de uno a tres años.
En gatos, sin embargo, los microfilariae están raramente, si alguna vez, descubiertos. Los gatos no son realmente el anfitrión natural para el parásito. Los felinos son un resistente, pero susceptible, el anfitrión, y el parásito puede ser atrapado con sitios de ectopic, como el sistema nervioso central u otras cavidades de cuerpo. Más comúnmente, los parasitos adultos se alojan en la arteria pulmonar derecha y el ventrículo derecho del corazón de un gato, por lo general sin obstruir con severidad el flujo de sangre. Mientras el gusano del corazón puede causar problemas serios, ellos pueden vivir durante años con o sin causar síntomas. Los gusanos del corazón no son diagnosticados tan a menudo en gatos como ellos están en perros, en parte porque los síntomas a menudo se parecen al asma u otros problemas respiratorios. Como los gatos generalmente no muestran síntomas y no hay ningún tratamiento corriente por la enfermedad en felinos, la enfermedad puede demostrar fatal sin la advertencia. Como el diagnóstico del parasito en felinos es difícil y a la enfermedad no es curable, la prevención es esencial, sobre todo en posiciones donde heartworms son una presencia constante. Hay gusanos del corazón orales y actuales preventatives para gatos, algunos de los cuales también pueden luchar contra otros parásitos como ascárides, anquilostomas, tricocéfalos, pulgas y ácaros de oído.
Para más información de el parasito del corazon en felinos enfermedad, para probar a su animal o comprar preventatives hablan a su veterinario.