viernes, 16 de agosto de 2013

Los Perros también se benefician de los Marcapasos

 
UT Colegio de Medicina Veterinaria habla de los marcapasos en los animales.


Los perros también se benefician de los marcapasos. Cada año, cientos de miles de perros en todo el país reciben un marcapasos, un pequeño dispositivo integrado en el músculo del corazón que está dirigido por una pequeña batería situada en el cuello del perro, de acuerdo con la veterinaria Sophy Jesty, cardióloga veterinaria de la Universidad de Tennessee, quien dice que su equipo pone entre uno y dos marcapasos en los perros cada mes. 

El signo clínico más común en los perros que necesitan marcapasos porque se está colapsando, dijo la Dra. Jesty, pero también puede presentar otros síntomas como debilidad y letargo. Es increíblemente gratificante ver la espectacular mejora en los perros en tan sólo unos días después de la implantación del marcapasos, dijo la Dra. Jesty.

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jueves, 15 de agosto de 2013

Adiestramiento del Perro; La Educación del Cachorro 2

Erik Farina 2012
Por fortuna, se ha avanzado mucho en los últimos 15 años. Si antiguamente se esperaba a que cumpliera seis meses de edad para empezar a educarlos pensando que antes no estaban preparados para afrontar algo tan duro como el adiestramiento, hoy, gracias a los nuevos métodos de adiestramiento y a la mejor comprensión de la psicología canina, es posible indicar la educación de un cachorro desde el día que sigue al de su llegada.


La mayoría de los propietarios creen que el adiestrarlos consiste en enseñarles a sentarse o echarse, pero en realidad un perro puede realizar estas acciones por sí mismo y no necesita que le enseñemos a hacerlo. El adiestramiento consiste en enseñar al perro un idioma extranjero (nuestro idioma) para que pueda entender qué le pedimos que haga y cuándo queremos que lo haga y en consecuencia obedecernos.


Educar a un cachorro consiste también en dejarle claro qué cosas le está permitido y cuáles no. Desde muy pronto, los cachorros poseen dientecillos punzantes como alfileres que cumplen antes de las 18 o 20 semanas, un papel muy importante en la educación. En efecto, jugar a morder es no sólo normal en los cachorros, sino también educativo. Los perros, igual que los niños pequeños, exploran el mundo que los rodea introduciendo objetos en su boca. Cualquier objeto que no reaccione cuando le clavan sus afilados dientecillos, debe ser inanimado; y cualquier objeto que dé muestras de dolor será, por fuerza, una persona o animal vivo.


Jugar a Morder


Jugar a morder enseña a los cachorros a moderar la intensidad de su mordedura cuando están jugando con seres vivos. Si ve cachorros muy jóvenes jugando,notará enseguida que ninguno se enfada al ser mordido.. salvo si el que muerde se ha excedido apretando. Si esto ocurre, el mordido chilla de dolor y se niega a continuar jugando durante unos segundos. Y esto mismo debemos hacer nosotros si nuestro cachorro nos muerde demasiado fuerte, para que sepa que nos ha hecho daño y no estamos dispuesto a jugar a sí.


Cuando nuestro cachorro nos haga daño con los dientes no debemos mostrarnos enfadados, sino sólo doloridos (la ira por nuestra parte sería interpretada por ellos como una incomprensible agresión.) Si su cachorro le clava los dientecillos, grite fuerte, déle la espalda y finja que el dolor no le permite seguir jugando. Esta actitud impactará un poco al perro la primera vez, pero no espere resultados inmediatos. Poco a poco, en los próximos días, los mordiscos irán perdiendo intensidad hasta que usted tenga que fingirse dolorido incluso la más leve presión.


Por último, empiece a expresar dolor con el solo roce de los dientes, y el cachorro dejará pronto de morderle. El perro debe aprender que a un humano no se le puede morder nunca, ni siquiera jugando.

Erik Farina 2012
Cuando Muerden Para Llamar La Atención


Algunos cachorros muerden precisamente para provocarnos. Esta conducta suele estar asociada al deseo de llamar la atención y producirse en hogares donde hay niños pequeños que chillan y agitan los brazos histéricamente cuando el perro le agarra la ropa. Esto hace, por supuesto, que la mamá venga corriendo a ver que es lo que está pasando y se provoque un gran revuelo alrededor.

El cachorro probablemente se siente muy satisfecho, recuerde que es mejor una regañina a que le ignoren a uno por completo. En estos casos conviene distraer al perro con juguetes y evitar la sobreexcitación del niño y del perro. Tambien funciona encerrar al cachorro en su jaulita o en una habitación adaptada y acondicionada al perro, durante un rato de vez en cuando, para que tanto el cachorro como el niño se calmen.

Llevar al Cachorro a Clases de Educación


Una de las formas más rápidas de lograr que un cachorro de menos de 18 semanas aprenda a controlar sus mordiscos es haciéndoles jugar con sus congéneres. Si lo lleva a una clase de socialización bien dirigida puede acelerar el proceso al tiempo que recibe ayuda en los demás aspectos del adiestramiento básico.

Encontrar una buena clase de socialización para el cachorro puede ser tan difícil como encontrar un buen colegio para su hijo. Más vale no precipitarse en la elección. Lo más importante es no perder la calma ni la paciencia mientras educa al cachorro; el perro aprenderá pronto si las circunstancias, y el método utilizado son correctos, y tanto el cachorro como usted se beneficiarán.

Lo mejor es ponerse en contacto con un buen psicólogo canino con una experiencia de más de 20 años , puede escribir y solicitar asesoramiento escribiendo a; psicolmascot@gmail.com

Como saber si la Clase de Sociabilización es Buena


-Si lo es, todos los asistentes, humanos o perros, parecerán relajados y felices. Estarn disfrutando de la clase.

-En ninguna clase buena se utiliza el castigo, pegar, dar golpecitos con la mano, pataditas o el collar eléctrico, para adiestrar. Lo único que habria es un trauma para el perro y el humano.

-Las clases deben ser poco ruidosas. Gritar es innecesario. Si los perros ladran mucho puede ser síntoma de estar estresados.

-Los métodos utilizados deben ser válidos para su perro y para usted. La comida y los juguetes motivan poderosamente a los cachorros. Para mucho perros no es suficiente una felicitación, una acaricia.

-Deben combinarse de forma armoniosa el adiestramiento (que no sea duro) y el juego controlado entre los perros.

-Si se permite a los cachorros jugar sueltos de la correa, ninguno debe tener menos de 18 semanas cuando comience el curso.

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miércoles, 14 de agosto de 2013

Comprender a su Perro

Erik Farina 2013
Los Rasgos Hereditarios

Hay factores muy diversos que influyen en la personalidad canina. Siempre habrá quien defienda la herencia frente a la experiencia y viceversa, pero lo más sensato es asumir que el carácter de nuestro perro estará formado en parte por rasgos heredados de sus progenitores y en parte por las experiencias que ha tenido o tendrá durante su periodo de formación, esto es, sus primeras semanas de vida.

La herencia influye mucho en el carácter: los hijos de madre nerviosa, agresiva, o asustadiza tienen muchas más posibilidades de ser de este modo que los hijos de madres tranquilas, seguras de sí mismas y amigables. Pero entendámonos, probablemente no estamos hablando tanto de herencia genética como del poderoso influjo de la madre durante las primeras semanas de vida, tan esenciales en la formación del carácter. Es muy posible que los cachorros imiten a su madre y reproduzcan su conducta en un futuro.

La Influencia y la Conducta


Las experiencias vividas durante las primeras semanas de vida también influyen en el carácter del perro adulto. Obviamente, una experiencia negativa del cachorro puede provocar que el perro tema un objeto o a una persona de por vida. Sin embargo, los estudios demuestran que incluso es mejor tener algunas experiencias negativas que vivir enteramente aislado del mundo real durante la infancia. Tal vez se deba a un fenómeno conocido como “inmunización frente al estrés”.


Cuantas más experiencias viva un cachorro (incluso si algunas le resulta desagradables), mayor será su capacidad de enfrentarse a lo que el futuro le depare. Esto no significa que no haya que proteger a los cachorros de las malas experiencias (por supuesto que hay que hacerlo), sino que una exposición al mundo exterior muy intensa puede contrarrestar los efectos de las experiencias desagradables y hasta de los rasgos negativos heredados.


Erik Farina 2013
 La Personalidad


Los cachorros nacen con tendencia a ser tímidos o seguros de sí mismos, impetuosos o tranquilos. De su personalidad dependerá que sea fácil o difícil educarlos, socializarlos o convivir con ellos. Por regla general, los cachorros o perros adultos seguros de sí mismos no consideran necesario mostrarse agresivos, lo que hace muy importante fomentar esta confianza.


Algunos perros son muy voluntariosos y tratan de burlar todas las normas, mientras que otros prefieren acatarlas sin discusión: como los humanos, unos son líderes natos, y otros gragarios como ovejas, pero todos deben aprender a comportarse en sociedad si quieren sobrevivir en este mundo moderno.


Con frecuencia los perros parecen reflejar como en un espejo el carácter de las personas con las que viven. Obviamente, un perro criado en una casa llena de niños traviesos será probablemente ruidoso, inquieto y experto en llamar la atención, mientras que otro criado por un tranquilo matrimonio de la tercera edad probablemente refleje como un espejo el modo de vida de sus amos.


Los propietarios nunca deberíamos subestimar la influencia que ejercemos sobre nuestros perros. Tal vez sea un difícil arte el de alcanzar el término medio; a veces nos gusta que nuestro perro sea divertido y con iniciativa, pero también nos gusta que sepa mostrarse tranquilo. No es casual que las personas que han tenido un perro con un trastorno de la conducta vuelvan a menudo a tener un perro con el mismo problema en el futuro. Aunque cada perro es un mundo, nunca debemos subestimar la influencia de nuestra actitud, nuestra forma de pensar y nuestros hábitos en ellos.


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martes, 13 de agosto de 2013

Tenga cuidado con la enfermedad por intoxicación de salmón.

Si usted tiene planes para llevar de pesca a su perro los fines de semana, la Asociación Médica Veterinaria de Oregon aconseja precaución con el pescado crudo.

Los perros que comen pescado crudo, como el salmón, la trucha, la lamprea y otros peces nativos del noroeste del Pacífico pueden estar en riesgo de intoxicación de salmón.

La enfermedad por intoxicación de salmón es una condición potencialmente mortal que es más frecuente en el pescado crudo desde San Francisco a la costa de Alaska.

También se produce hacia el interior a lo largo de los ríos de la migración de los peces.

La enfermedad por intoxicación de salmón es causada por el organismo Neorickettsia Helmonthoeca, que también puede afectar al sculpin, al redside Shiner, al sábalo, al esturión, candlefish y al large-scale que viven en el noroeste del Pacífico.

El organismo tipo rickettsia está integrado con Nanophyetus salmincola, una casualidad de estar en el pescado crudo.

Cuando un perro se come un pescado contaminado, las larvas de trematodos liberan las rickettsias, que se extendió a través de la sangre a los órganos y tejidos de un perro, posiblemente resultando en necrosis, hemorragia, y la hiperplasia.

Si no es tratada, la enfermedad por intoxicación del salmón puede matar a un perro dentro de dos semanas de la exposición. Los síntomas son similares a otras enfermedades gastrointestinales tales como la parvovirus canina.

Si un perro está infectado, es probable que empiece a mostrar síntomas en un plazo de seis a diez días después de comer los peces infectados.

Los síntomas pueden incluir: -La falta de apetito. -Depresión. -Fiebre (generalmente 40 grados o más). -Vómito o diarrea. -Congestión en la nariz y los ojos. -La pérdida de peso.

Si usted vio a su perro comer pescado crudo y está mostrando alguno de estos síntomas, llame a su veterinario inmediatamente.

La enfermedad por intoxicación de salmón puede ser tratada con un antibiótico y antiparasitario si se detecta a tiempo.

Decirle a su veterinario que su perro pudo haber comido pescado crudo puede ayudar a él o ella para tratar a su mascota.

Ojo, para prevenir la enfermedad por intoxicación de salmón:

-Mirar lo que su perro se come cuando se va usted de pesca, o a un rio a jugar. -Mantenga a su perro con una correa.

-Envuelva la basura y las entrañas de los peces cuidadosamente y disponerlos en botes bien asegurados.

-Nunca alimente con pescado crudo a su perro. Asegúrese de que está bien cocido o congelarlo durante al menos dos semanas, que pueda matar al parásito, antes de dársela a su perro.

Por: Monique Balas.

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lunes, 12 de agosto de 2013

La Socialización del Perro

Llamamos socialización al proceso por el cual los animales sociales aprenden a enfrentarse y relacionarse con el mundo exterior. Los perros necesitan tratar con otros perros y personas para aprender a vivir en el mundo que les rodea. Un cachorro correctamente socializado suele convertirse en un adulto bien adaptado socialmente. Un perro joven necesita aprender cómo es el mundo que le rodea, cómo los hombres, mujeres, niños, ancianos y los otros perros, para no tenerles miedo al día de mañana y reaccionar de la forma adecuada en sus relaciones sociales.


Lo Que se Puede Esperar de Cada Edad


La Primera Infancia: El Período Neonatal; las dos primeras semanas de vida.


El perro recién nacido parece una diminuta hoja en blanco en la que todo está por escribir. Sin embargo, aunque parezca ignorar por completo cómo debe comportarse fuera del útero materno, no debemos dejarnos engañar: depende por completo de la madre para alimentarse, mantener su temperatura corporal y estar físicamente protegido, pero en realidad no está tan desvalido como parece.


Qué hacer: Aunque aún no pueden vernos ni oírnos, debemos cogerlos y tocarlos. Viven en un mundo de olores y sensaciones táctiles, y están perfectamente preparados para empezar a acostumbrarse a nuestro olor y nuestras caricias.

El Periodo de Transición: Entre las dos y cuatro semanas de vida.


En esta época el cachorro evoluciona con extraordinaria rapidez. Sus oídos se abren y empiezan a reaccionar frente a los ruidos fuertes dando muestras de sobresalto. También abre los ojos, y pronto empieza a reaccionar ante la luz y los objetos en movimiento.


Qué hacer: Prepararlo para la fase de socialización, procurando que su entorno sea cada vez más variado y complejo con el fin de que aprenda a enfrentarse al mayor número posible de cambios en el entorno doméstico.

La Socialización: Entre las Cuatro y Doce Semanas de Vida.


Los cachorros entran en el período de socialización a partir de la cuarta semana aproximadamente, y las ocho semanas que siguen son las más críticas de su vida; también las más importantes desde el punto de vista educativo. De hecho, se ha demostrado que los cachorros que no han tenido contacto con los humanos entre las cuatro y las doce semanas de edad evitan el contacto con ellos, tienen miedo de la gente y puede ser imposible adiestrarlos más adelante sin ayuda profesional. Hacia el final de este período, sus patrones de pensamiento y su capacidad de concentración son ya similares a los de un perro adulto.


A la mayoría de los cachorros se les deja con la madre hasta que cumplen las siete u ocho semanas de vida. En este tiempo se produce el destete, y los cachorros deben enfrentarse a la severidad de su madre cuando les niega las mamas y la frustración de no poder mamar. También aprenden ahora, jugando con sus hermanos, a tratar con sus semejantes, a moderar la fuerza de sus mordiscos y asumir un estatus social, que calibran compitiendo con sus compañeros de camada por los recursos.


A esta edad tan temprana ya es posible observar las primeras manifestaciones de sus instintos sexuales y de caza. Con cuatro o cinco semanas, los cachorros de ambos sexos pueden ya montarse mutuamente durante el juego, así como saltar sobre un juguete y zarandearlo como si estuviesen dando muerte a una presa.


Qué hacer: Como los cachorros suelen dejarse con la madre hasta bien entrado el período de socialización, corresponde al criador o propietario de ésta acostumbrarlos a los diferentes ruidos, olores, texturas, imágenes y voces que se producen en el entorno doméstico. Por lo tanto, cuando usted recoja al cachorrito éste deberá haber sido expuesto ya a gran cantidad y variedad de estímulos.


Antes de separarse de su madre, un perrito debería haber conocido personas muy diversas entre sí, y lo ideal sería que también se hubiese familiarizado con el mayor número posible de elementos de la vida cotidiana posible. Cualquier cachorro que aún no esté debidamente socializado necesita ayuda urgente de un profesional, un psicólogo canino.

La Educación Continua


La socialización debe prolongarse al menos hasta las doce semanas de edad, de modo que, si ha recogido a su cachorro antes de este momento, será su responsabilidad continuar su proceso de educación en esta época tan delicada de su desarrollo. Incluso a los cachorros que no fueron debidamente socializados en su momento les vendrá bien ahora que se les vaya mostrando poco a poco y con delicadeza el mundo exterior con el fin de lograr que se acostumbren a las personas, objetos y sucesos habituales en el hogar y fuera de él.


Hay que ocuparse de proporcionar a los cachorros la mayor cantidad y variedad de experiencias posibles antes de las doce semanas, a pesar de que lo más habitual es que no hayan completado aún su primer ciclo de vacunaciones y, por lo tanto, no pueden todavía relacionarse libremente con los demás perros. Una posible con los demás perros. Una posible solución de compromiso es sacarlos a la calle o al parque en brazos; otra sería llevarlos a casa de los amigos o hacer que éstos vengan a nuestra casa a visitarlos.


También es bueno hacerles tratar con otros perros, siempre que nos conste que éstos son adultos, son sociables y están perfectamente vacunados contra todo. Esfuércese en proporcionarle todo tipo de experiencias antes de que cumpla doce semanas de vida, todas las que pueda tener en el hogar cuando aún no pueda salir a la calle, y el resto, en cuanto esté preparado para empezar a salir.


Si necesita ayuda de un profesional y estar bien asesorado, en la selección de un cachorro nuevo o con la socialización de su perro, puede ponerse en contacto con nosotros en el correo: psicolmascot@gmail.com


Copyright © Por: Erik Farina, Psicólogo Canino y Adiestrador Profesional


Contacto: psicolmascot@gmail.com


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