La cría nació el domingo, pesa 60 kilos y mide unos 170 centímetros. Mama con regularidad y sus movimientos aún son torpes y sin coordinación.
El parto, que se desarrolló en presencia de sus cuidadores y del equipo técnico, se produjo a las 20.40 del domingo, aunque había comenzado 90 minutos antes en la pradera exterior de jirafas y en presencia de los visitantes que, sorprendidos, pudieron ver cómo 'Tatu' rompía aguas, tenía las primeras contracciones, e incluso cómo empezaban a salir las patas del 'jirafito', antes de que los cuidadores condujeran a la madre a las cuadras interiores de la instalación para tener mejor control del proceso.
Una vez que se produjo el nacimiento, la cría consiguió ponerse en pie en aproximadamente una hora y media, y comenzó a mamar media hora después, han precisado las mismas fuentes.
Comportamiento 'inmejorable'
Desde el primer momento el comportamiento de la madre fue "inmejorable", así como el del padre, 'Henry', y el de la otra hembra de jirafa, 'Mica', que también estaban presentes cuando la cría nació.
La cría, un macho, mama de su madre con regularidad y sus movimientos todavía son muy torpes y sin coordinación. Se calcula que su peso ronda los 60 kilos y que mide unos 170 centímetros.
Durante su primer año de vida aumentará su altura en más de un metro (los especialistas estiman que crecen 0,3 centímetros al día) y cuando cumpla los dos años, casi alcanzará la altura de su madre.
Las jirafas paren una sola cría después de 14 meses de gestación. Se alimentan de las hojas y brotes de los árboles, teniendo preferencia por las acacias, y suelen vivir en pequeños grupos flexibles de machos y hembras.
Existen seis subespecies de jirafa y su área de distribución está repartida por África occidental, oriental y meridional.
Programa Europeo de Cría
Este nacimiento se produce dentro del Programa Europeo de Cría y Conservación de esta especie (EEP) en el que el Zoo de Madrid participa.
Los programas EEP aúnan esfuerzos para conservar especies amenazadas como la jirafa; en 2006 se calculó un censo de 600 ejemplares de la subespecie Rothschildi.
Por el momento, y hasta que la cría adquiera la seguridad y agilidad necesaria, permanecerá junto a su madre en la instalación interior de jirafas donde el público podrá verla.
En menos de 10 días, madre e hijo podrán salir al exterior junto a sus congéneres y al resto de animales que ocupan la pradera africana del Zoo Aquarium de Madrid.